Estamos en el planeta Arrakis, en un futuro muy lejano. Cubierto por inmensas dunas de arena, Arrakis tiene todo el aspecto de un páramo inerte y abandonado.
Pero en realidad esconde un tesoro valiosísimo. Entre la arena, crece la especia Melange, la más preciada materia prima del cosmos.
Tres “casas” se enfrentan por el control de la especia. Son los nobles Atreides, los astutos Ordos y los malvados Harkonnen. La lucha entre ellos es encarnizada. No en vano saben que el que logre controlar la producción del preciado elemento controlará también el universo.
Así empieza Dune, una trama basada en los exitosos libros de Frank Herbert que bajo el mismo nombre fueron llevados también a la gran pantalla. Una obra de culto, vamos. En el juego, nuestra misión consistirá en tomar las riendas del ejército de una de las tres casas y hacernos con el control de las dunas de Arrakis.
Para lograrlo deberemos templar los nervios, coger el ratón con pulso firme y poner en juego toda nuestra capacidad de estrategas. El futuro del universo pasa por nuestra manos...
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